Este es nuestro año, jajajaja

Así es como los aficionados a los Dallas Cowboys nos curamos de espanto y nos doramos la píldora cada temporada, pensando en que algún día todo se alineará para que sea realidad y este sea nuestro año.

Es una frase “alentadora" que poco a poco ha perdido valor y sentido, además de convierte en un lugar común. Así pasa cuando se acumulan los años, pasan los lustros y se convierten en décadas sin que llegue ese momento en que sea nuestro año.

La realidad es que es imposible saber cuándo será el año de los Cowboys, es más un asunto aspiracional, de amor a los colores y de confianza en el equipo, algo que definitivamente se ha perdido en la gestión de Jerry Jones.

Mientras Jones sea el centro de atención en la franquicia y no delegue las responsabilidades deportivas en gente realmente capaz, no se vislumbra el momento en el que un año sea el de los Cowboys.

¿Qué sentido tiene convocar a una conferencia de prensa con un anuncio muy importante cuando se trata, en el fondo, de gritar a todos los vientos que tienes el control?

En Dallas se sabe que no puede ser de otro modo. Jerry Jones tiene la primera y la última palabra y no hay para donde hacerse.

La conferencia de prensa importante, que sí lo fue, se dio para anunciar la firma de un acuerdo de los Cowboys con Blockchain.com, un sitio especializado en criptomoneda, una tendencia creciente en el mundo que ha echado ojo en el mundo de los deportes y siendo Dallas una de las principales franquicias deportivas en el mundo, representa un gran atractivo.

El tema es que Jerry Jones no dejó pasar la oportunidad para apuntar que el equipo está dispuesto a escalar posiciones en el Draft si llega el momento y la situación lo amerita.

En la vida hay que actuar y no anticipar los movimientos, mucho menos cuando tienes un “cuarto de guerra” en el cuál tomas las decisiones deportivas más importantes para el futuro del equipo.

La última vez que los Cowboys subieron posiciones en la primera ronda del Draft fue hace 10 años, cuando seleccionaron al CB de LSU Morris Claiborne. Lo que a la larga no resultó en un gran movimiento.

Es momento de ejecutar los planes y dejar de pregonar cuáles serán los siguientes movimientos, lo ideal es que los Cowboys tomen por sorpresa al mundo de la NFL y que le den motivos a sus aficionados para cambiar esa frase y que algún día puedan decir con orgullo ESTE FUE NUESTRO AÑO.